Ir al contenido principal

CERCAS, LOS BUENOS Y LOS MALOS

Javier Cercas esta muy molesto con la pugna entre Almudena Grandes y Leguina. Concretamente está muy enfadado con las opiniones de éste último, e intenta desmontarlas desarrollando una argumentación basada, creo, en dos puntos.

1) Desde el punto de vista político la Guerra Civil sí fue, contra lo que predica un cliché tramposamente ecuánime, una guerra de buenos contra malos: como en casi todas las guerras, en la nuestra no hubo un bando moralmente del todo bueno y un bando moralmente del todo malo, pero sí hubo, como en tantas otras guerras, un bando políticamente bueno y un bando políticamente malo, un bando que defendió la legalidad democrática y un bando que la destruyó.

Este punto de vista exige aceptar que los comunistas, los socialistas y los anarquistas no eran revolucionarios, sino fervientes defensores de la democracia. Podría argumentarse que al menos los dos primeros habían aceptado formalmente las reglas de juego democrático como paso previo a la dictadura del proletariado, pero ni siquiera eso es cierto. Aceptaban la democracia como camino de acceso al poder, pero si las urnas eran desfavorables perdían rápidamente interés en la “legalidad democrática”, como pudo comprobarse en el año 34.

2) Es imposible equiparar el terror del bando franquista con el terror del bando republicano durante la Guerra Civil, al modo en que lo hace Leguina, porque el segundo duró el tiempo que el Gobierno legítimo tardó en tomar el control de su zona y se practicó sin su aprobación (o al menos sin su aprobación explícita)

Esta tesis de Cercas es rotunda pero inexacta. Por ejemplo, pasa por alto que fue el propio gobierno de la República (el Gobierno de Giral) el que decidió ”armar al pueblo”, es decir, entregar armas a todas las organizaciones revolucionarias de izquierda. Y lo hizo el 19 de julio, cuando sólo había transcurrido un día desde el alzamiento militar. Tampoco explica la versión de Cercas los crímenes cometidos en aquellas zonas republicanas donde las autoridades republicanas mantuvieron en todo momento el control, como es el caso de Madrid. Por último, el punto de vista de Cercas no encaja muy bien en aquellas zonas donde se produjo una íntima colaboración entre las fuerzas revolucionarias y las autoridades, como es el caso del gobierno dual de los anarquistas y Luís Companys en Cataluña.

Cercas se subleva especialmente ante esta frase de Leguina "La inmensa mayoría de la derecha española renegó de la democracia durante la República y, desde luego, durante la guerra... Pero es que la izquierda, en gran parte, hizo lo mismo, tomando la deriva revolucionaria". Para Cercas no se puede hablar en absoluto de revolución, y éste, afirma, es un asunto donde ”no hay discrepancia posible, porque hace tiempo que fue zanjado por los historiadores.. Se ignora cuáles pueden ser esos historiadores a los que se refiere (aparte de Ian Gibson), pero me permito traer un ejemplo discordante: Hugh Thomas, que titula el segundo libro de ‘La guerra civil española’ alzamiento y revolución. Además, según Cercas, tampoco se pueden comparar los bandos porque el franquista actuaba siguiendo un plan de exterminio, y aquí, al menos, podemos rastrear las fuentes de conocimiento del escritor: Baltasar Garzón y Jay Allen.

En resumen, el artículo de Cercas no se entiende bien tal y como está formulado, pero se comprendería muy bien si se hubiera atrevido a escribirlo como, tengo la impresión, le pide el corazón: la guerra civil sí fue un enfrentamiento de buenos y malos, pero no porque unos defendieran la república y otros no, sino porque unos eran la izquierda y, por consiguiente, tenían razón. Es precisamente éste el sectarismo que Leguina denunciaba personificado en Almudena Grandes.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA INAUDITA HISTORIA DE LOS BEBÉS ROBADOS

« Es lamentable la falta de interés de la justicia y de la derecha para que haya mecanismos para reparar estos delitos de lesa humanidad . El PSOE debe sumarse a este esfuerzo ». Los delitos de lesa humanidad a los que se refiere Enrique Santiago son los «bebés robados» del franquismo, y el esfuerzo que requiere del PSOE es seguir adelante con la proposición de ley presentada en 2020 en Cortes por ERC, PSOE y Podemos, Bildu y Baldo(ví), y que lleva atascada desde entonces. La exposición de motivos de la empantanada iniciativa nos cuenta esta historia. Queridos niños… « Durante décadas, y hasta etapas muy próximas, en España se ha producido, amparada en la impunidad, una de las mayores atrocidades que ha vivido nuestro país. Un número inmenso de niños fueron sustraídos en cárceles, clínicas y maternidades, y sus familias biológicas siguen sin saber su paradero a día de hoy ». No me dirán que no es una historia tremenda, y que la desolación de Enrique Santiago no está justificada. Se tr

ISRAEL Y EL DILEMA DEL TRANVÍA

Seguro que han visto mil veces el dilema: un tranvía circula sin frenos por una vía en la que hay tres personas despistadas. Sin embargo usted, que por alguna razón misteriosa maneja un cambio de agujas, puede desviarlo a otra vía donde también hay una persona despistada, pero sólo una. ¿Qué hacer? Este es el dilema favorito de los utilitaristas: si en una vía hay 3, y lo desvío a otra donde hay 1, ahorro 2. Perfecto, dilema moral resuelto y a otra cosa. Es una forma de cálculo satisfactoria para los totalitarios. Primero porque elude ciertos juicios morales previos (¿por qué circula el tranvía?; ¿por qué están ahí las personas?) pero sobre todo porque convierte a los humanos en números, que son más fáciles de manejar (¿qué importan unos millones de muertos actuales cuando está en juego la felicidad de todo el mundo en el futuro?) No es de extrañar que esta doctrina moral fuera desarrollada, con su mejor intención, por Jeremy Bentham, que al parecer sufría serias deficiencias en su

VIERNES DE SEXO (10) (THIS IS THE END, MY FRIEND)

  Las dos primeras décadas de este siglo han presenciado cambios notables en la actividad sexual de los hombres. Un estudio de Peter Ueda expone que el porcentaje de estadounidenses entre 18 y 24 años, que reportan no haber mantenido relaciones sexuales en el último año, ha ascendido del 19% al 31% , y otras encuestas indican que -en ese mismo periodo- el porcentaje de hombres que llegan vírgenes a los 30 años ha subido del 8% al 27% . Estas tendencias –que se repiten en otros países- afectan abrumadoramente a hombres de bajo estatus, y no se repiten en mujeres, lo que indica –para empezar- que algunos hombres están follando más. ¿Qué está ocurriendo? Los sospechosos habituales son las redes sociales y el porno, pero no parece que, ni remotamente, la respuesta se encuentre allí.  Las apps de citas proporcionan datos interesantes.  - Ordenados en función de su atractivo para el otro sexo, el 20% de los hombres más deseados acapara la atención del 80% de las mujeres. Esto presenta un pa